domingo, 3 de agosto de 2008

De domingos dolororosos


duele como duelen las flores apagadas


en el fin del alba un pétalo se estrella con la luz

duele

estoy en la frontera sigo el camino me tropiezo con un minuto

duele

tiempo que duele y no espera en la sala de espera del tren

duele el paso siguiente la huella de atrás y la de enfrente

ay dolor mío deja de doler tanto

duele la lluvia en el paraguas
duele el resfriado en los zapatos

duele y no calla
es tan ruidoso este dolor
que necesito taparme los ojos para no sentirlo

hoy mi sonrisa estática es diferente a la de los otros días
hoy hasta las muecas de las mejillas me duelen

ay dolor mío cuándo te iras a buscar
otra piedra
otro árbol
otro dolor
otro domingo

duele como duelen las estrellas cuando explotan en el cosmos
duele como duelen los domingos en las arterias

1 comentario:

Anónimo dijo...

Como vos lo fijiste.... nadie va a morir ahora.

Mau Melgarejo