martes, 28 de febrero de 2017

XX:

 Recuerdas esos días en que los alcatraces del parque hundido entintaban tus pies y tú volabas sobre de ellos cual soberana mariposa vuela por su reino de locura y arrebato y yo estiraba mis brazos para acogerte como aquella manzana que ha caído del árbol y ha sido mordida por la serpiente pero menos por mi boca que desea ser un trozo más de tu alma.
 XX, recuerdas la lluvia que transportabas en el cabello el día sábado en que los paraguas oxidados dejaron de funcionar, esa lluvia tocó superficialmente tu piel, hoy bajo el sol tembloroso de febrero, este sol que no se define frío ni oscuro, este sol que calcina pero no calienta, este pedazo de huevo duro, te pido ser esa lluvia constante que como flujo de río arriba te acaricie vello por vello hasta aprenderme el nombre de cada uno de tus poros y pronunciar con megáfono a tu oído, quiero cogerte hoy viernes , hoy en que los policías bancarios son cada vez más gordos y las secretarias de los diputados del PAN más putas, hoy que es el día en que procrearemos al nuevo mesías, al que vendrá a liberar a este mundo jodido de religiones y odio, hoy en que tus ojos son libélulas diabólicas en busca de un exorcismo.
 XX déjame llevarte de la mano a ese sofá viejo y montémonos en él como si fuéramos relámpagos que cabalgan en la tormenta, un par de niños que juegan a formar quimeras.
 Silencios que se encuentran con el eco y se repiten una y otra vez: El amor esta en tu boca, el amor esta en tu boca, el amor esta en tu boca, el amor esta en tu boca, hasta que desaparece y se escuche de nuevo el sudor que caerá como torre de nueva york después de un ataque terrorista.


jueves, 16 de febrero de 2017

Amor Diávolo



Hablemos del amor diabólico
Ese que se nutre de los muslos del alba
Ese que se escucha en radio-crimen por las mañanas
Y se entretiene con las noticias de los últimos
Asesinos en serie
Hablemos de ese amor nena
Bien sabes que te gusta
Te hace sentir lo que no sientes cuando anochece en tu abrigo
De estrellas y ángeles
Recuerda que lo que sientes cuándo no te beso
Es una explosión de cráneos en el alma
Y cuando te beso un grito transparente
Rodea la noche en qué lloras por sed y frío

No importa tengo taquicardia
Y un abismo lleno de aeroplanos de guerra

Bueno pues
Hablemos de lo que nos hace falta en este verano
Necesito una lágrima de silencio
Necesitas algo para tu insomnio?
018002280040
Habla y te dirán que las nubes aborregadas
También tienen pesadillas
Que en el panteón no hay reliquias
Y que las flores que ahí crecen le cantan
A la piel marchita de los elefantes
Habla
Y te dirán que el amor diabólico
Necesita de ojeras para alimentar
El hielo de Luzbel
Sí nena será por eso que es hermoso pertenecer a la ignominia
Y ser vasallo de las piedras que nunca salen del volcán
O no?
Ahora me siento triste  
Desolado
Ahogado
Imagínate que hoy he visto nacer un pájaro sin vuelo
Un gorrión que se aventaba a la noche porque no tenía ojos
1 trino que era el de un muerto
Eso es posible?
Sí sí
Ahora mis manos están pegadas al cuello
No soy amigo de los cuchillos
Porque me estiman y se adhieren al pecho
Pero si soy amigo de las manecillas del reloj
Que siempre apuntan la hora de la muerte
Pequeñalindamapola
Hablemos del amor diabólico
Ese que nos nutre el páramo de odio
La memoria madre llena de violaciones
El disco duro que acumula el 018002280040
Y 200 plegarias a San Judas Tadeo
 Infrinjamos pues lo que somos Leucemia y hastío
El hijo prodigo de la violencia
El aquelarre de las abuelas que tiran a sus nietos al rencor
Hablemos de nuestro Amor que ahora nos hace falta día
Nos hace falta un segundo para explorar lo que no vivimos
Luchemos pues
Por eso que nos deja sin sangre
Hagamos del sentimiento
La torre de babel y quien llegue a la cima
Que luche por dios o con dios
Por eso somos diabólicos amorosos
Que se despedazan con petardos

De la infancia en la edad de la blasfemia



lunes, 6 de febrero de 2017

¿Alguna vez dije que te amaba?


Recorro las tiendas de outlet y no encuentro
Algo que vista a mi sombra
Subo escaleras y al llegar al techo recuerdo que dejé
 La taza de café en la mesa del rincón
ahí donde nos tomamos de la mano
Y me dices: eres frío como Siberia
Veo el cielo y la soledad es una gran nube en forma de muerte
Lloro y recuerdo tus pies a la orilla del abismo
¿Por qué nunca saltas?
Iría tras de ti con alas de cera y al alcanzar tus pies
Los besaría con mis labios de invierno
Besaría tus pies de sangre que caminan por las piedras del volcán
Tus pies de arena
Cangrejos suicidas en la espuma del mar
¿Alguna vez dije que te amaba?
Tengo preocupaciones infinitas
Y aún así hace muchos años en el hotel Goya
Te leí el WalkingAround y usaste tu sostén
Para limpiar lágrimas y sudor que se manifestaban
En la frente y en la barbilla
Sucede que ese día no cogimos
Sucede que estoy cansado de ser un panteón
Lleno de cuervos y de flores amarillas
Sucede que estoy lleno de recuerdos y desgracias
Que por momentos llegan como lluvia
A mis manos temblorosas

¿Alguna vez dije que te amaba?
Quisiera saberlo
Saber que mis palabras no tienen complicaciones y son reales
Como lo son las balas y los soldados
Como son las chicas nazis del metro insurgentes
Como lo es el floripondio y la amapola
Quisiera tener pétalos en vez de uñas  
Quisiera que Ratzinger se balaceara el alma con su luger
Quisiera que hubiera paz mundial como lo desea la miss México
Y que Hugo Chávez no fuera tan feo
Quisiera ser un barco de papel
Quisiera verte la cara sonriendo como un ancla navega
Nadando con calma
Quisiera saber si alguna vez dije que te amaba
Quisiera ser una guayaba en tu boca
Una guayaba de otoño
Cortada por un campesino tuerto
Ayer te dije que un relámpago
Mató a un colibrí que comía de las flores de nuestra ventana
Te dije que el sol dejó ciega a una monarca mariposa
Que salía de su capullo
Hace unos años me encontraba asustado
Debajo de una piedra
Y vi tus piernas largas y me subí a ellas
Y ellas me apretaron mucho que me puse rojo
Y así rojo llegue a tu abdomen en donde tienes tatuada
Una calaverita de azúcar
Subí hasta llegar a los girasoles de tu cuello
Y ahí fue cuando mi voz (que sólo era un grito)
Que despertaba de un mal sueño te preguntó:

¿Alguna vez dije que te amaba?