Hoy no he podido hacer una oda a tu cabellera
No he podido
acostúmbrate a eso
Hoy he amanecido vencido
Con los labios rotos y con la mirada perdida en el techo
(Tal vez el techo tenga alguna respuesta para mí
O de menos caiga de su letargo de años)
Hoy no te he escrito ni una copla ni un centauro ni un bolero
acostúmbrate a esto mujer
cuando uno amanece sordo disléxico con modorra
suspendido en los pensamientos y con llanto acumulado
no se puede hacer mucho
difícilmente llegaría a la computadora para abrir el archivo de los poemas
que con tu sonrisa has provocado
para llegar hasta allá
necesitaría tres caballos percherones para que me jalaran de la cama al escritorio
y aún así no podría sacudir mis dedos en el teclado
Qué se puede hacer
A veces uno amanece con la devaluación ahorcando todo sentimiento
Con la piel arrugada de tanto estirar el salario mínimo
Con los ojos hundidos por no poder invitarte al parque
Ya que el aire que ahí se consume cuesta mucho dinero
Y mí economía no puede pagar esos lujos
Acostúmbrate mujer
Porque cuando se amanece con la lengua callada
Y con las ojeras de panda en cautiverio
no se puede hacer buena poesía
no se puede escribir de amor
cuando el mundo se quiebra y se desvanece
Qué le puedo hacer?
Quisiera tener metáforas para tus muslos
Un racimo de versos para adornar tu cabello
Un jardín de poemas para tus ojos de abeja reina
Pero hoy he amanecido con dolores
Y cuando a uno le duele su mar interno
Es imposible escribir de amor
Acostúmbrate a que no siempre pueda llenarte de vocablos la entrepierna
Hay días difíciles
Como el de hoy que empieza a llover antes de que los niños salgan de la escuela
En la calle el gris del cielo es igual al gris de los supermercados vacios
Y mis levi´s huelen a llanto y a tristeza acumulada
Hoy mis manos tienen la textura de la nieve de Siberia
Son frías y catastróficas
Se encuentran hundidas y temblorosas
Están tristes y desahuciadas
Así de ese tamaño es el dolor cuando se amanece con la mirada fija en el techo
Afuera cantan las hojas quebradas del otoño
Adentro
Adentro de mí cantan los edificios derrumbados
Perdona que no te pueda escribir un poema de amor
Bien sabes que te mereces un universo y un vergel de estrellas
Pero hoy no
Hoy pequeña constelación de mis noches insomnes
los banqueros han huido hacia las Islas Caimán
Y nos han dejado aquí con la alacena sin insumos
Y con las paredes marchitándose
Acércate a mí y dame un abrazo
Hoy sólo puedo darte un beso en la frente y decirte que te amo
Con todo y alta de precios
Y con los submarinos nucleares que sacan su nariz para acechar al mundo
Aunque te parezca raro me afecta que Wall Street sea un caos
Y que los capullos de los árboles se queden congelados y sus alas no extiendan
Acostúmbrate a la inseguridad de nuestra época
A la congoja y a la imposibilidad de ser arcoíris
cuando el invierno acecha triunfal su entrada al precipicio
pero te amo y eso no lo cambia ni el régimen
ni los perpetuadores del odio
ni mucho menos un país en quiebra
te amo porque eres el mormullo que me resucita
cuando la crisis entra al bolsillo de mis pantalones viejos
3 comentarios:
Para un poeta que escribe esto, y para quien lo inspira, sólo puedo dejar mi silencio, un silencio que significa un gran asombro, una grata impresión.
Se necesita a una mujer menos puta que las musas para platicarle de cómo florecen colibríes en el pecho al instante de nuestra evocación. Bien amigo, sufres bien chingón, tu pasión y tu presión alta son tan poeticas...
siempre y mucho
Cristian
Como te lo dije por teléfono: ciertamente este es el mejor poema que "me has escrito", y lo pongo entrecomillado porque no es sólo escrito para mí, te dije que le pusiste sentimiento y mucho... por eso vemos este resultado... no es mi poema... es de todos y yo te agradezco mucho que lo hayas escrito... que te hayas abierto de esa manera.
Te quiero mucho
y te digo de una vez
que el próximo sábado no estaré aquí
poniendo un comentario en tu blog
el próximo sábado estaré
comentando algo en tu oído.
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