Para Fadia por regalarme una bella foto y para que ya no se estrese más.
Encontrarte flor de la noche suspendida
Decirte que eres la primera estrella en expandir su luz
en el vientre de los sauces
Galáctica voz de zirconios milenarios
Me obsesiona escuchar tu manto acuífero y navegar por las cuencas de tu piel
Embeberte una y otra vez las metáforas que flotan en tus senos
acariciarte todos esos silencios que se forman en tus pantorrillas
anochecerme acostado en tu lumen
encontrarte de espaldas y empezar a besar el círculo
que se forma en tus mejillas cuando sonríes
encontrarte agarrada de las llaves de agua
tener tus manos de río salvaje en mis manos de tierra prometida
encontrarte en el desván de la orilla espumosa
suspender tus manos en el cielo y decirte:
Eres un poema de amor
Un poema que no sé cómo escribirlo
Ni mucho menos sé
Cómo terminarlo
Encontrarte silenciosa en la bañera
Rompiendo con tu boca las olas que se forman cuando tus caderas navegan
Encontrarte escuchando los versos que mis dedos dibujan
Aunque no lo parezca este es un poema de amor para tus manos acuáticas
Y para tus rodillas de cascada
Y para tu voz de lluvia pasajera
Y para que un día cuando llegue del trabajo
Te encuentre en la regadera
Como flor que se hidrata cuando es besada por las nubes
Y entre con mis palabras grandilocuentes a la ducha para zumbarte tus pétalos
Y todo el tallo verde
Y te acaricie la espalda y tu ombligo que será mi alberca
Decirte que eres la primera estrella en expandir su luz
en el vientre de los sauces
Galáctica voz de zirconios milenarios
Me obsesiona escuchar tu manto acuífero y navegar por las cuencas de tu piel
Embeberte una y otra vez las metáforas que flotan en tus senos
acariciarte todos esos silencios que se forman en tus pantorrillas
anochecerme acostado en tu lumen
encontrarte de espaldas y empezar a besar el círculo
que se forma en tus mejillas cuando sonríes
encontrarte agarrada de las llaves de agua
tener tus manos de río salvaje en mis manos de tierra prometida
encontrarte en el desván de la orilla espumosa
suspender tus manos en el cielo y decirte:
Eres un poema de amor
Un poema que no sé cómo escribirlo
Ni mucho menos sé
Cómo terminarlo
Encontrarte silenciosa en la bañera
Rompiendo con tu boca las olas que se forman cuando tus caderas navegan
Encontrarte escuchando los versos que mis dedos dibujan
Aunque no lo parezca este es un poema de amor para tus manos acuáticas
Y para tus rodillas de cascada
Y para tu voz de lluvia pasajera
Y para que un día cuando llegue del trabajo
Te encuentre en la regadera
Como flor que se hidrata cuando es besada por las nubes
Y entre con mis palabras grandilocuentes a la ducha para zumbarte tus pétalos
Y todo el tallo verde
Y te acaricie la espalda y tu ombligo que será mi alberca
5 comentarios:
bravo...
je, ya no ando tan estresadita...gracias
Como siempre tus versos son esa cascada donde el silencio grita.
Beso acuático.
Natalia Brand
Gracias. Te quiero mucho ñiño, traigo un tremendo dolor de cabeza motivado por el estrés, pero ya se pasará ^^
Me da gusto leer un nuevo poema en donde redescubro tu estilo. Me da gusto que no seas una imitación de nadie y por lo mismo en este comentario no voy a citar a nadie (Finalmente ¿Qué son las citas sino recursos de los idiotas que no se pueden formar opinión?). Sólo puedo decir que leerte es un placer, uno que ya es difícil experimentar en estos días. Un abrazo.
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